{"id":9177,"date":"2020-11-23T11:59:03","date_gmt":"2020-11-23T11:59:03","guid":{"rendered":"https:\/\/arquitectodeideas.com\/?p=9177"},"modified":"2024-01-29T08:18:04","modified_gmt":"2024-01-29T08:18:04","slug":"radio","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/arquitectodeideas.com\/radio\/","title":{"rendered":"Creaci\u00f3n de programas de radio"},"content":{"rendered":"\n
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La radio fundamenta su capacidad de comunicar, de transmitir sensaciones, en la combinaci\u00f3n de cuatro recursos sonoros:

la palabra,
la m\u00fasica.,
los ruidos,
y
el silencio.

Combinados entre s\u00ed o individualmente, estos recursos conforman el discurso, el mensaje radiof\u00f3nico, cuya caracter\u00edstica esencial es, su unisensorialidad.

Sin embargo, la radio, aunque no utiliza el soporte de la imagen, puede estimular la imaginaci\u00f3n del oyente. \u00abEl guionista y comentarista radiof\u00f3nico escoge sus palabras de forma que creen las im\u00e1genes adecuadas en la mente del oyente, consiguiendo as\u00ed que su relato sea comprendido y debidamente interpretado.\u00bb (McLeish 1985:16)<\/p>\n\n\n\n


Hay que abordar un programa de radio como si fuera un viaje a un pa\u00eds desconocido. <\/strong>Como una expedici\u00f3n por una geograf\u00eda ignota y sugerente, en la que participan dos equipos, coordinados con vistas a un objetivo \u00fanico, pero empe\u00f1ados en misiones, tareas, cometidos distintos y espec\u00edficos para cada uno de ellos.

Unos y otros se gu\u00edan por un solo sistema de se\u00f1ales – c\u00f3digo de instrucciones- y avanzan por un mismo territorio, pero no en soledad: se les vigila.

No hay dos programas iguales, como no existen dos pa\u00edses<\/strong>, sino dos viajes iguales, ni aunque el viaje lo realice la misma persona, a trav\u00e9s de un espacio conocido y en id\u00e9ntica compa\u00f1\u00eda, cambian sus circunstancias, o se viven de una manera diferente. Se centra la atenci\u00f3n en un aspecto que antes no se advirti\u00f3. Establecemos entre las cosas, las pautas, los silencios, nuevas relaciones.. Las palabras suenan, en el mismo lugar y condiciones, de un modo diferente. Se hallan satisfacciones imprevistas, dificultades, momentos en que el suelo, para bien o para mal, parece que nos falta debajo de los pies -porque no existe mapa que detalle todos los accidentes del terreno, ni experiencia que se pueda aplicar a cada paso-. Y se llega al final, la m\u00e1s de entre las veces aliviado (si haya suerte) y, sobre todo, exhausto. Eso o estamos muertos y, en tal caso, carece de sentido preocuparse.

El programa es un VIAJE y el ESPACIO (la tierra prometida) es el TIEMPO que ese programa -\u00abespacio\u00bb se le llama tambi\u00e9n- dura<\/strong>. En ese ESPACIO\/TIEMPO se dibujan, a modo de accidentes, los contornos, paises, los momentos\/lugares por los que la acci\u00f3n fluye y en \u00e9l se desarrolla un argumento. No importa que se trate de un programa informativo, musical, \u00abde compa\u00f1ia\u00bb o de \u00abcreaci\u00f3n\u00bb pura: todos tejen su \u00abl\u00ednea argumental\u00bb y todos necesitan un ESPACIO donde desenvolverse.

Pero ese ESPACIO \u00bfexiste? Salvo en su dimensi\u00f3n transitable -donde el programa debe producirse- es s\u00f3lo un hueco en la programaci\u00f3n : es el vac\u00edo.

El objetivo del PROGRAMA es sacar ese ESPACIO de la nada. La funci\u00f3n del GUI\u00d3N es darle unos contornos definidos, crear su geograf\u00eda, y habitarlo.

Hablamos del programa como un viaje cuyo destinatario final es el oyente, que es quien, con su aceptaci\u00f3n o su rechazo, nos va a dar la media del \u00e9xito, aunque aqu\u00ed no estar\u00eda de mas arriesgar una primera puntualizaci\u00f3n: el \u00e9xito o el fracaso de un programa como tal se debe medir en tanto haya logrado la atenci\u00f3n y el reconocimiento del p\u00fablico al que dicho programa se dirige, no en funci\u00f3n de los \u00edndices absolutos de audiencia, que preocupan, sin duda, a la emisora. \u00c9sta calibrar\u00e1 si dicho p\u00fabico debe ser atendido o despreciado- de ah\u00ed la pol\u00e9m\u00edca sobre las radios \u00abde servicio\u00bb y su vigencia, en contraposici\u00f3n a las radios llamados \u00abcomerciales\u00bb.

El oyente es el fin y la sanci\u00f3n, pero nos vamos a permitir una peque\u00f1a \u00abvenganza\u00bb: \u00e9l hace el viaje, va montado en la barca y ve el paisaje, se emociona, se moja y rema a veces, pero apenas si nota resistencia ni el tir\u00f3n del tim\u00f3n o de las riendas: su placer es vicario. El placer primogenio, el m\u00e1s puro placer, es el del creador; en el sentido de aquel que, no sabiendo qu\u00e9 va a ocurrir despu\u00e9s (ni d\u00f3nde, ni por qu\u00e9), ya en el gui\u00f3n, ya en el \u00abdirecto\u00bb mismo o en las grabaciones, puede determinarlo.
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ESCUELA DE METAFORMACI\u00d3N<\/span>
968 24 66 24 – 689 60 20 19 <\/span>
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